¿QUÉ ES EL MINDFULLNESS?
Mindfulness podría considerarse un conjunto de técnicas de meditación que pretenden liberar la mente de pensamientos nocivos y desagradables, de tal modo que fortalezcamos nuestra mente para alcanzar el bienestar personal y la paz interna, favoreciendo el estado de tranquilidad , armonía, y felicidad consigo mismo, desembocando en la máxima de tales técnicas, que es el logro de un incremento de la calidad de vida de las personas que lo practican.

Consiste en implicarse activamente en el ahora, en el momento presente, de tal modo que se tenga una completa consciencia sobre el acontecimiento que estamos viviendo, sin pretender mantener un control sobre el mismo, ya sea un pensamiento, una emoción, un recuerdo, una actitud, alguna palabra procedente de otro individuo, etc.
Se trata de percibir y observar el momento que sucede sin juzgar ni intervenir, lo que favorece que podamos recibir una mayor y mejor sensación de la situación que estamos viviendo; supone la aceptación de la realidad tal y como se presenta en el momento en que nos encontramos.
Las técnicas del Mindfulness pueden resumirse en los siguientes términos: centrarse en el momento presente; apertura a la experiencia y a los hechos; aceptación radical de la experiencia y vivir con atención plena.
Desde la antigüedad se conocen sus beneficios y se viene practicando multitud de variedades de técnicas de meditación, entre la que podemos encontrar la meditación Zen, la meditación Penetrante, la meditación Trascendental, la meditación Mantra entre algunas otras. Hace más de dos mil años los budistas ya creían que un estado de atención consciente favorecía a la reducción de las situaciones de estrés y de la ansiedad y, además, potenciaba la creatividad de la persona, la capacidad de reflexión y de propiciar un entendimiento nítido de las circunstancias ante las que se debiera enfrentar, aumentaba la habilidad para una adecuada gestión emocional y propiciaba una mayor capacidad de disfrute del momento presente.
En definitiva , no se busca el control de las reacciones, sino que la persona las experimente de forma natural, viendo como cada una de ellas suceden por si mismas.