¿Alguna vez has sentido que después de un invierno largo y frío o de un verano cálido y húmedo deseas renovar todo lo tuyo? La casa, la ropa, tu maquillaje y, por supuesto, tu cabello. Es una gran sensación cuando limpias tu guardarropa y tiras algo de ropa vieja y usada y la reemplazas con los últimos diseños y los colores de moda. ¡Y luego agregas un poco de maquillaje novedoso, y todo lo que le queda a tu NUEVO YO es buscar y escoger un nuevo estilo de peinado para prepararte con vistas a la nueva temporada!

- Otra cosa a tener en cuenta es la forma de tu cara. Si te gusta un corte de pelo concreto de tu mejor amiga, y esta tiene un grosor de cabello similar, comprueba si la forma de la cara es equivalente. ¡Se trata de un buen punto para discutir con tu peluquero ya que no debemos resaltar nada sobre lo que deseamos ocultar de nuestra estructura facial!
- Entra en Pinterest, Instagram o cualquier otro medio online, y haz una captura de pantalla o guarda las imágenes de los estilos que te gustan. También puedes recortar fotografías de revistas para mostrarlas a tu peluquero. Pero recuerda siempre tener en cuenta la misma regla anterior.
- Considera cuánto tiempo y esfuerzo estás dispuesta a gastar para mantener el cabello que te gusta. Muchos estilos requieren más esfuerzo, por lo que si dispones de poco tiempo, tu deseo no va a funcionar. Si sabes que solo te queda el tiempo justo para dormir lo necesario, y apenas te sobran ratos para pasar el cepillo por tu pelo, hacerte un peinado que cueste mantenerlo no es para ti.
- Llega pronto al salón, siéntete con tu peluquero y analiza todo lo que hemos dicho. Muestra tus fotos y tus imágenes y habla sobre los pros y los contras respecto al aspecto con el que deseas salir y pretendes mantener fácilmente. Sé precisa con la longitud del corte que quieres. Si piensas en un nuevo color, hazlo a la vez en un gran cambio.
- Averigua (antes de comprometerte con tu nuevo estilo) si es necesario comprar algún equipo o producto especial para mantener el peinado cuando estés en casa. Los cepillos, las planchas alisadoras, las pinzas para rizar y los productos del cabello cuestan dinero, por lo que si esto te supone un problema, debes considerar tu decisión.
- Una vez que te sientes en el sillón de la peluquería y hayas explicado a fondo lo que quieres, escucha los consejos de tu peluquero y, si estás de acuerdo con todo, trata de relajarte. No hables sin parar con él para que no se desconcentre de su trabajo. Cuando termine de hacer el corte, observa cuidadosamente cómo se seca el cabello, y toma nota mental del tamaño de los cepillos y de otros equipos utilizados.
¡Ahora ya has terminado y te ves increíble! Estás lista para salir con tu nueva apariencia y conquistar el mundo.